Con el crecimiento del e-commerce (creció un 50% en el país, moviendo US$ 6,000 millones) y el uso de plataformas online, muchas personas comenzaron a preguntarse cómo tramitar tarjetas de crédito, débito o prepago virtuales en bancos o instituciones financieras.
Esto se debe a que el uso de tarjetas es más eficiente, cómodo y seguro cuando se compara online o presencial. Así, las personas pueden hacer compras sin tener que salir de casa. Pero a todo esto, ¿Cómo funciona una tarjeta de crédito? ¿Es lo mismo que una tarjeta virtual? A continuación, te explicamos el funcionamiento de ambos sistemas y las diferencias entre tarjetas pre aprobadas y tarjetas virtuales prepago.Diferencias entre tarjetas de crédito pre aprobadas y tarjetas virtuales prepago
Las tarjetas virtuales o prepago tienen un número de tarjeta, fecha de caducidad y código de seguridad, que son los datos que solicitan las páginas web a los consumidores para completar cualquier transacción. Aunque el funcionamiento es similar, se diferencian de las tarjetas de crédito convencionales en varios aspectos:
- Se almacenan en tu teléfono (generalmente, en una app), donde puedes consultar los datos que necesitas saber.
- No implican costos de mantención, comisiones ni intereses, ya que el dinero es siempre tuyo y no del banco.
- No hace falta contratarlas en una institución bancaria.
En cambio, en cuanto a las tarjetas de crédito, esta modalidad permite a su titular adquirir o pagar servicios en establecimientos afiliados a la red de pagos de la tarjeta. En este sentido, funcionan como una tarjeta virtual, salvo que son físicas y se contratan en una institución financiera.
La mayoría de las personas buscan tramitar tarjetas de crédito gratis para pagos de diversos servicios y compras en línea. Sin embargo, las tarjetas virtuales son una mejor alternativa por las siguientes razones:- Extravíos: Las tarjetas de crédito pre aprobadas (físicas) se extravían con facilidad y pueden ser robadas / hackeadas. Si esto pasa, el titular debe poner en marcha el proceso de cancelación a través del banco para evitar que sus productos financieros se vean afectados. Este proceso puede implicar una demora mayor. Esto no sucede con las tarjetas prepago ni con las virtuales; al contrario, tienes pleno control de tus finanzas en todo momento.
- Gestión: La administración de las tarjetas virtuales se realiza 100% en línea. No hace falta ir al banco para pagar o recargar saldo.
- Límites de compras: Las tarjetas virtuales permiten al usuario cargar manualmente los fondos que desea gastar. Esto permite establecer un límite fácilmente, mientras que, con las tarjetas de crédito pre aprobadas, puedes perder el control de tus gastos sin darte cuenta.
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Con Ligo, puedes obtener una tarjeta virtual online sin todo el papeleo que normalmente debes hacer al ir a un banco para conseguir una tarjeta de crédito convencional.
Las tarjetas de prepago Ligo sirven para todo tipo de compras, siempre y cuando la plataforma acepte pagos con VISA. Además, no vas a endeudarte usando una tarjeta prepago virtual, ya que el dinero disponible será tuyo y no de Ligo o de una entidad financiera. ¿Qué esperas para pedir tu tarjeta prepago Ligo y comenzar a utilizarla como más te guste, sin comisiones ni costos de mantención? Además es más práctica y segura.
