A menudo se dice que lo más arriesgado que se puede hacer en los negocios es adivinar. Y es especialmente cierto cuando se está comenzando en un nueva emprendimiento, particularmente en estos tiempos inciertos. Cada nueva idea de negocio se basa en suposiciones que hacemos sobre el mundo que nos rodea. Sin embargo, muchos aspectos de nuestras vidas, hábitos y comportamientos han cambiado debido a la pandemia ¿Cómo puede saber si sus suposiciones siguen siendo ciertas? Es por ello que antes de apostar por tu última y mejor idea, debes probar tu pensamiento en el mundo real. Aquí te enseñamos un proceso simple de siete pasos para comenzar:
1. Describe tu idea
Las ideas a menudo deben escribirse antes de poder verlas por lo que son. Entonces, el primer paso para validar tu idea es plasmarla en un papel, ver si todavía tiene sentido y averiguar si falta algo.2. Define tu público objetivo
“Me dirijo a cualquier cliente” no es una estrategia para el éxito. Debes definir quién es tu audiencia específica y quién no. Piensa en quién es más probable que compre tu producto/servicio, dónde se encuentran, qué los motiva y qué están tratando de lograr. Intenta establecer un perfil completo o “persona” para tu cliente ideal. Si no puedes definir quiénes son, podría ser el momento de repensar tu idea de negocio.3. Define el problema
Otra cosa que debes comprender al principio del proceso de validación es si tu producto o servicio es «imprescindible» o «bueno tenerlo». Si resuelve un problema claro y conciso en la vida de los clientes, será más fácil persuadirlos a que paguen por ello. Y si realmente no resuelve un problema ni agrega valor, ¿Qué es exactamente lo que hace?
4. Habla con tu audiencia
Una vez que hayas creado tu persona y hayas definido el problema, debes ir y hablar con personas del mundo real para obtener sus comentarios. Encuéntralos donde puedas: en las redes sociales, calles principales, búsquedas en línea, a través de artículos de medios y blogs. Asegúrate de hablar con clientes que realmente coincidan con el perfil que has creado, y no solo con familiares y amigos. Siempre pregúnteles ‘¿por qué? ¿por qué es una buena idea, por qué estás interesado/desinteresado, ¿por qué solo estarías dispuesto a pagar X por ello?5. Determina tu competencia
Vale la pena saber quién es tu competencia, porque esto te ayudará a descubrir qué hace que tu idea se destaque en el mercado (precio, características únicas, servicio al cliente, ubicación, etc.). Pero no te obsesiones demasiado con lo que hacen otras personas. En la mayoría de las líneas de trabajo hay mucho espacio para una competencia sana.6. Ponle precio a todo
Elabora un plan financiero básico, que incluya cuánto costará hacer realidad tu emprendimiento, lo que deberás cobrar para alcanzar tus ingresos, objetivos y los gastos en los que incurrirá a lo largo del camino. Si los números no cuadran, tu idea debe ajustarse.7. Intenta venderlo
Los comentarios positivos sobre tu idea son geniales, pero no siempre garantizan futuras ventas. Por lo tanto, podría valer la pena ir un paso más allá e intentar vender algo, por ejemplo, anunciar tus servicios en un sitio web o publicar un prototipo de tu producto en línea. ¡Solo asegúrate de poder entregar los productos en caso de que recibas una respuesta positiva! Sea cual sea tu idea, en algún momento tendrás que ir más allá de la validación y comenzar a convertir tu idea en una realidad empresarial. Así que mantén las cosas simples, estate enfocado en lo esencial y recuerda que el único objetivo general es verificar que tu idea funcione en el mundo real con personas reales.
